Los brackets pueden corregir la mayoría de los problemas de sobremordida. Durante la etapa de evaluación, las radiografías ayudan a determinar el tipo de sobremordida y la conexión entre los dientes y la mandíbula. Los brackets se fijan a los arcos superiores e inferiores de los dientes. El arco de alambre primero endereza y alinea los dientes.
Durante la segunda etapa, se pueden utilizar elásticos (pequeñas bandas de goma) para desplazar lentamente la línea de la mandíbula a la posición correcta. Las bandas se colocan en los soportes para ayudar a mover los dientes y la mandíbula. Las bandas se suelen quitar las antes de comer, beber y cepillarse los dientes. También es importante llevar las bandas en todo momento (salvo los casos anteriormente mencionados), para que se aplique una presión constante.
La etapa final del tratamiento es utilizar un alambre permanente o usar un retenedor para mantener los dientes en el lugar deseado.
¿Cuándo se debe comenzar el tratamiento?
Cuanto antes se pueda comenzar el tratamiento de ortodoncia, mejor. El rechinar o apretar los dientes puede dañarlos. Algunas sobremordidas dificultan la limpieza de los dientes, por lo que el paciente corre el riesgo de sufrir caries y enfermedades de las encías.
¿Cuánto tiempo se tarda en corregir una sobremordida con brackets?
Cada caso es diferente. Los problemas menores pueden requerir sólo 3 o 4 meses, pero en los casos de sobremordida grave, los brackets pueden ser necesarios durante al menos 2 años. Una vez que los brackets se quiten, se debe usar un retenedor para mantener los dientes en su lugar.
¿Pueden la ortodoncia por sí sola arreglar una sobremordida?
Algunos adultos con problemas graves de la mandíbula necesitan algo más que brackets para corregir el problema. En algunas situaciones, se requiere una cirugía para reposicionar la mandíbula. Los brackets pueden combinarse con otros tratamientos como la cirugía o las extracciones dentales.
Durante la adolescencia la mandíbula en crecimiento ayuda a que los brackets muevan los dientes mejor a la posición deseada. Un tratamiento temprano en niños puede incluir un expansor de paladar para ampliar el tamaño de la mandíbula para acomodar los dientes apiñados en una mandíbula pequeña. Una mandíbula más grande facilita que los brackets muevan los dientes a la posición correcta y evita la necesidad de extraer los dientes.